Desastre ecológico: muerte de peces intencionada

Cientos de peces y otros animales marinos han muerto. El hecho ocurrió en San José del Cabo, en el sur de Baja California, México. Parece inconcebible tener que mencionar una mortandad de peces que puede que haya sido provocada por el hombre. Pero esto fue lo que ocurrió en esta ciudad turística mexicana.

Imagen: sergio.majluf

Cientos de peces y otros animales marinos han muerto y esto fue debido a la apertura de la bocana del estero josefino de San José del Cabo donde habitan.

“Ya hemos hecho recorridos y estamos por tener un reporte, hoy estaremos en condiciones de darlo a conocer. Creemos que la apertura de la bocana fue de manera intencional, será difícil saber quién lo hizo”.- fue lo expresado por el director municipal de Ecología, el biólogo Raúl Rodríguez Quintana.

Según lo poco que se ha podido investigar hasta el momento, todo lleva a pensar que la mortandad de peces y demás animales marinos se debió a que la barra de arena fue retirada de manera intencional, sin detenerse a reflexionar en los efectos que esta accción podría causar.

Los efectos de este acontecimiento produjeron el desbordamiento del cuerpo del agua, ya que aún estaban afectadas por el fenómeno meteorológico Jimena de las lluvias pasadas. Esto fue lo que pudo informar el biólogo Rodríguez Quintana, Director Municipal de Ecología de la zona turística.

Esto representa un nuevo atentado a la Reserva Natural Protegida y, lamentablemente, se registra a muy pocos días de que se suscitara el incendio que causó fuerte afectación en el área de los palmares.

Frente a los hechos contundentes, no cabe más que señalar que esto significa un desastre ecológico al que se ha visto sometido el estero. En la actualidad, el sitio se halla completamente vacío ya que toda el agua se ha ido hacia el mar. Diferentes especies han quedado varadas en los pocos escurrimientos que se han salvado.

Como si todo esto fuera poco, algunos ciudadanos del lugar turístico se acercaron para llevarse algunos ejemplares que, supuestamente, serán destinados con fines de consumo y otros pra su comercialización, como los camarones y las cabrillas de arroyo o las jaibas que abundan en este lugar.

Según puntualizó Rodríguez Quintana, ante un desastre ecológico de esta dimensión, la Direción Municipal de Ecología se ocupará de evaluar los daños y, posteriormente, se enviarán los resultados al gobierno estatal que es responsable directo de la protección del medio ambiente.